Puede que no sea una verdadera fobia, pero el miedo a perder masa muscular está bastante extendido entre los que entrenan constantemente en el culturismo y más allá. Para muchos atletas, la fase de definición muscular representa una obligación que, sin embargo, desencadena cierta ansiedad en aquellos que temen ver reducida su masa muscular.
¿Por qué? ¿No pueden coincidir las dos cosas?
Definición de los músculos para la grasa y el magro
Para quienes desean adquirir un verdadero físico de culturista o para quienes aspiran a convertirse en entrenadores personales, el entrenamiento constante es esencial para construir un cuerpo modelado, empezando primero por el aumento de los músculos y luego por su definición.
El primer paso es aumentar la masa y requiere una precisa ingesta calórica, además de hacer ejercicio en el gimnasio. El excedente de proteínas y nutrientes específicos es la base para aumentar la estructura, pero al mismo tiempo podría pesar la figura y, en particular, el abdomen con la masa grasa. Convertirse en más redondo es un riesgo para aquellos que quieren aumentar la masa muscular, y para ello hay que pasar a la fase de definición muscular.
Las personas con un metabolismo rápido, delgadas y con tendencia a "ectomórficas" no corren mucho riesgo, pero las que tienen tendencia a acumular grasa, pueden necesitar definir la masa con precisión.
Sin embargo, para las personas delgadas, el riesgo es también el de perder masa, y no hay necesidad de entrenar excesivamente sino de apoyarse en una dieta bien determinada para crear las condiciones para el aumento de peso y de músculo.
Para las personas gordas, también es esencial perder masa muscular al principio si es necesario, para ganar una mejor forma de peso, y luego pasar a la definición de los músculos.
La fase de definición debe adelantarse para crear una base para un mayor crecimiento posterior.
Reducir el porcentaje de masa grasa y definir
Estos son los imperativos para lograr una figura perfecta, la fase de definición muscular debe mantener la masa magra y los volúmenes musculares tanto como sea posible al mismo tiempo. No es sencillo, pero para obtener una definición óptima es importante aplicar las normas generales a casos individuales, evitando los errores típicos de quienes, por temor a perder masa, no definen o pierden peso.
La fase de corte o definición debe partir de una musculatura ya desarrollada, obviamente, por lo que aquellos que no tienen una musculatura sostenida, deben ante todo poner masa. La fase de definición parte de una situación de alta grasa corporal (BF) para poder reducirla con el adelgazamiento, pero si no se tiene masa se queda vacía y con el riesgo de una mala tonicidad. En estos casos se recomienda un enfoque de recompra corporal.
También se definen cuidadosamente las calorías y los macronutrientes, eliminando alimentos como los carbohidratos en exceso pero sin terminar en una pérdida de peso excesiva, que luego provoca un estancamiento y el vaciamiento de los músculos. No debe haber fases drásticas de definición, así como no se recomiendan fases extremas para el aumento de la masa. El cambio de una dieta alta a una baja en calorías de un día para otro es una fuente de graves desequilibrios y posibles trastornos alimentarios.
El entrenamiento aeróbico o cardiovascular no es la solución para cada definición muscular: es importante quemar el exceso de grasa y calorías, pero seguramente la aceleración metabólica no es esencial para la definición muscular.
Tenga cuidado con las dietas innovadoras pero desequilibradas, que prometen resultados excepcionales pero no siempre son saludables - seguir dietas vegetarianas, paleo, etc. puede no ser óptimo para algunos sujetos ni para el adelgazamiento ni para la definición muscular.
Los milagros no existen y por eso los suplementos para quemar grasa no pueden funcionar a menos que se combinen con la dieta adecuada.