Aunque no es necesario aplicar el acondicionador después de cada champú, su cabello podría beneficiarse de una mascarilla hidratante profunda semanal. Para nutrir mejor tu cabello:
Distribuye el bálsamo sobre las longitudes.
Déjelo en su cabello durante 10-15 minutos antes de enjuagarlo. Luego usa el champú y otra vez el acondicionador como de costumbre.
Cuando enjuague el acondicionador por segunda vez, use sus manos para peinar suavemente el cabello, en lugar de frotarlo para eliminar todos los rastros del producto.
Luego realice un enjuague final con agua fría.
Limpie los peines y cepillos regularmente.
Además de lavar su cabello constantemente, también debe cuidar la limpieza de sus herramientas de peinado.
El sebo del cabello graso puede transferirse fácilmente a los dientes y cerdas. Al peinarse y cepillarse, el sebo se puede esparcir sobre el cabello.
Lava peina y cepilla con agua tibia y jabón.
Deja que el cabello se seque en el aire.
Trate de no secarlos con una toalla o un secador de pelo.
Si frota el cabello contra el tejido esponjoso o lo envuelve mientras aún están húmedos, hará que la toalla se frote con fuerza, lo que provocará la aparición de puntas abiertas.
Prefieres usar una camiseta vieja o una funda de almohada. Su tejido más suave que el de una toalla reduce el riesgo de dañar el cabello.